
Tengo algo dentro. Algo que me recorre de abajo a arriba una vez, y otra, y otra...
Tengo ganas, pero tengo miedo. Miedo a no conseguir de nuevo esa confianza. Miedo de no librarme del miedo y los reparos. Miedo a no volver a querer igual.
Tengo una burbuja que me impide acercarme, que me obliga a mantener distancias de seguridad. Aunque a veces deseara tener un alfiler a mano para explotarla, siempre me vuelvo cobarde.
Se merece que rompa la burbuja. Se lo merece por el simple hecho de que ha desviado su camino con el único propósito de venir a encontrarme en el mío.
Ojalá sea esa persona capaz de arrancarme el miedo y todo lo demás. Ojalá.
Tengo ganas, pero tengo miedo. Miedo a no conseguir de nuevo esa confianza. Miedo de no librarme del miedo y los reparos. Miedo a no volver a querer igual.
Tengo una burbuja que me impide acercarme, que me obliga a mantener distancias de seguridad. Aunque a veces deseara tener un alfiler a mano para explotarla, siempre me vuelvo cobarde.
Se merece que rompa la burbuja. Se lo merece por el simple hecho de que ha desviado su camino con el único propósito de venir a encontrarme en el mío.
Ojalá sea esa persona capaz de arrancarme el miedo y todo lo demás. Ojalá.

que identificada me siento con eso... algún dia explotara, solo hay que tener paciencia y armarnos de valentia.
ResponderEliminarUn abrazo princesa!
http://sexandthemadriles.blogspot.com/
¡ Ánimo, que seguro que se rompe esa burbuja ! La gente tímida las rompemos menos, pero cuando se rompen nos liberan de cargas muy pesadas.
ResponderEliminarAi Juanjo...ojalá! Nunca mejor dicho!!
ResponderEliminarA esas personas que adoran el comienzo de las aventuras, las primeras veces, las primeras citas...y yo que odio todo eso!!!!!!!!!!!
Un saludo