sábado, 23 de abril de 2011

Perfección



-¿A qué se debe tu retraso?
-Estaba fabricando el hombre perfecto.
-Cariño, tengo que confesarte algo: lo perfecto nunca funciona.

martes, 19 de abril de 2011


Reflexionando has caído en el pequeño detalle de que a veces lo que necesitas no es lo que quieres, que lo que quieres no siempre es lo que encuentras, lo que encuentras no siempre es lo que buscas y lo que buscas no siempre te hace feliz.
Quizás es porque hay quienes te tienen delante y no te ven, y quienes te han visto sin mirar.

martes, 12 de abril de 2011

Impotencia (amorosa) masculina




¿Os acordais de mi reciente y aparentemente eterna pregunta?,¿por qué no quería acostarse conmigo?

Pues la respuesta es bien simple, cotillas.

Tras acostarse con alguna tía, acto seguido, se volvía un pasota y perdía el interés por completo en ella. En cuanto me lo contó me recordó a ese capítulo de Sexo en Nueva York en el que Carrie acude a una psicoanalista y allí comienza un tórrido romance con otro paciente. Os dejo por aquí el enlace para el que quiera ver cómo termina la cosa.

La mía no termina de forma tan rápida, pero desde luego que termina. A este fenómeno lo he denominado impotencia (amorosa) masculina.

También hay que recalcar que nosotras, en nuestra gran mayoría, padecemos el denominado enamoramiento platónico (postcoital) femenino. Algunas aprenden a superarlo y lo dejan atrás, aprendiendo a no imaginarse un mundo lleno de detalles, (com)penetración perfecta y viendo una pareja ideal en aquella persona que apenas conocen.
Y digo esto porque soy de la opinión de que jamás podrás conocer a alguien perfectamente. Las personas cambian de gustos, opiniones y comportamientos. No hay nadie bueno o malo, capaz o incapaz de hacer algo. Todo depende. Los límites existen hasta que los sobrepasamos. Nunca podrás estar seguro de conectar con alguien y conservar la relación (sea del tipo que sea) por el resto de tu vida, porque quizás, la semana que viene, consideres que está comenzando a comportarse como un capullo, o bien esa persona considere eso mismo de tí.

¿Cuál es el detonante de su repentina pérdida de interés? Hombres, si andais por ahí... ¿podéis ayudarme un poco? Me encuentro perdida y desorientada. Quiero conocer algo más acerca de este síndrome.


No es que sienta miedo repentino a pegársela contra el suelo, como puede sucedernos a nosotras. Es que de repente, toda esa ilusión y esas ganas, desaparecen. Así, sin más. Como por arte de magia.
Algo hace que prenda la chispa, y en cuestión de minutos cambia su actitud por completo. Y ya nunca vuelve a ser el mismo. No puedes hacer nada para cambiarlo.
Él se volverá incapaz de sentir algo más por tí, tú no podrás evitar seguir enamorandote cada día más de él. Se ha descubierto a un impotente amoroso, y tú has resultado ser una enamoradiza platónica compulsiva.







martes, 5 de abril de 2011

Cartas para Claudia


Aníbal Sabatini decía que la plenitud (o felicidad o nuestro más deseado objetivo) está dentro de una habitación frente a nosotros. Sabemos que sólo tenemos que abrir la puerta y ya está. Entonces, nos acercamos, giramos el picaporte (pues sabemos que no hay cerraduras) y empujamos. En un primer momento, la puerta no se abre. Debe estar trabada, pensamos, y empujamos más fuerte. No hay caso. Aumentamos el esfuerzo, sin éxito. Llamamos a nuestros amigos, familiares y terapeutas para que nos ayuden a empujar. Lo hacen. Pero la puerta no cede. Nunca nos detenemos. Nunca dejamos de empujar en nuestra vida. Y empujando, empujando, nunca nos damos cuenta.
Nunca nos damos cuenta que no se trata de empujar, sino de acercar con suavidad la puerta hacia nosotros.

Jorge Bucay


Related Posts with Thumbnails
Las imágenes que ilustran los posts están seleccionadas de internet. Deja un comentario si alguna te pertenece y tienes algún inconveniente en que sea usada para ilustrar el blog. Gracias